El dolor postoperatorio no solo compromete el bienestar del animal, sino que también puede interferir en la recuperación quirúrgica, retrasar la cicatrización y favorecer complicaciones como anorexia, hipoventilación o incluso agresividad.
Por eso, el manejo eficaz del dolor tras una cirugía no es opcional, sino parte esencial del protocolo anestésico y postquirúrgico. Vamos a ver cómo combinar de forma inteligente los diferentes tipos de analgésicos para lograr una analgesia multimodal adaptada a cada paciente.
¿Por qué es clave controlar el dolor tras una cirugía?
El dolor quirúrgico tiene componentes tanto nociceptivos como inflamatorios, y si no se trata correctamente puede cronificarse, convirtiéndose en un dolor neuropático mucho más difícil de manejar.
Además, en la experiencia clínica, hemos observado que los animales que reciben analgesia adecuada desde el intraoperatorio hasta 48–72 horas después presentan:
- Menor necesidad de sedación complementaria
- Mejores niveles de ingesta y movilidad temprana
- Mayor cooperación con el tutor en casa
- Menor incidencia de complicaciones gastrointestinales
El objetivo no es “eliminar” el dolor por completo, sino mantenerlo en un rango que permita al animal estar tranquilo, funcional y sin estrés.
¿Qué factores influyen en la elección de la combinación analgésica?
Veamos qué hay que tener en cuenta antes de elegir qué fármacos usar y en qué combinación:
- Tipo de cirugía: no requiere la misma analgesia una ovariohisterectomía que una cirugía ortopédica o una toracotomía.
- Especie y raza: los gatos metabolizan muchos fármacos de forma diferente a los perros. Además, razas como el Greyhound o el Collie tienen peculiaridades farmacogenéticas.
- Estado general del paciente: edad, función hepática y renal, deshidratación, etc.
- Condiciones preexistentes: si hay inflamación, dolor crónico o hipersensibilidad previa.
Todo esto debe valorarse de forma individual para diseñar un protocolo eficaz y seguro.
Analgesia multimodal: el enfoque más eficaz
La analgesia multimodal se basa en combinar fármacos con mecanismos de acción diferentes que actúan en distintos niveles de la vía del dolor. Esto permite reducir las dosis individuales, minimizar efectos adversos y mejorar la eficacia global.
Categorías principales de fármacos analgésicos
Vamos a ver las opciones disponibles y cómo se pueden combinar:
AINEs (antiinflamatorios no esteroideos)
Son la base de la analgesia postoperatoria por su efecto antiinflamatorio y analgésico. Se deben administrar solo cuando no hay contraindicación renal o gastrointestinal.
- Carprofeno
- Meloxicam
- Robenacoxib (en gatos)
Consejo clínico: en cirugías ortopédicas, los AINEs deben mantenerse al menos 5 días tras la intervención.
Opioides
Indispensables en procedimientos dolorosos o en animales que requieran control más intenso.
- Buprenorfina: buena opción en gatos y perros con dolor moderado.
- Metadona: excelente en el postoperatorio inmediato.
- Morfina, fentanilo: reservados para dolor severo, bajo control monitorizado.
Adyuvantes
Son fármacos que no son analgésicos puros, pero potencian la analgesia o modulan el dolor de manera indirecta.
- Dexmedetomidina: sedación y analgesia visceral. Útil en cirugías abdominales.
- Ketamina: bloquea la sensibilización central (efecto antihiperalgésico).
- Lidocaína IV o en infusión continua: especialmente útil en dolor neuropático o cirugía torácica.
Anestesia regional o local
Técnicas como bloqueos locales, epidurales o infiltraciones permiten reducir el uso de fármacos sistémicos y mejorar el confort postquirúrgico.
- Lidocaína o bupivacaína infiltrada en plano quirúrgico
- Bloqueo del nervio ciático o femoral en cirugías ortopédicas
Protocolos prácticos según tipo de cirugía
Veamos ahora ejemplos reales de combinación analgésica según el tipo de intervención:
Tipo de cirugía | Combinación recomendada (perro) | Combinación recomendada (gato) |
Esterilización | AINE (carprofeno) + buprenorfina cada 8 h durante 24–48 h | Robenacoxib + buprenorfina cada 8 h |
Cirugía ortopédica | AINE + metadona + ketamina en perfusión IV continua 24 h + infiltración local con bupivacaína | Robenacoxib + buprenorfina + infusión de lidocaína/ketamina (según tolerancia) |
Cirugía abdominal mayor | AINE + metadona + dexmedetomidina + bloqueo local + ketamina intraoperatoria | Robenacoxib + metadona + dexmedetomidina + infusión de lidocaína |
Dolor severo postoperatorio | Fentanilo IV + ketamina + AINE + lidocaína (según perfusión) | Buprenorfina alta dosis + infusión de ketamina + AINE si tolera |
Claves prácticas para el seguimiento en casa
El trabajo no acaba al dar el alta. Hay que instruir al tutor sobre cómo identificar signos de dolor y cómo administrar la medicación:
- Signos de dolor en casa: vocalización, inquietud, falta de apetito, aislamiento, jadeo constante.
- Evitar automedicación: muchos tutores intentan dar paracetamol o ibuprofeno, lo que puede ser tóxico.
- Revisión postoperatoria a las 24–48 h: imprescindible para ajustar o retirar medicación según evolución.
En nuestra experiencia, cuando el tutor entiende qué observar y cómo actuar, se evitan recaídas y hospitalizaciones innecesarias.
Tabla resumen
Fármaco | Dosis recomendada (perro) | Dosis recomendada (gato) | Vía y frecuencia |
Carprofeno | 4 mg/kg/24 h | No recomendado | Oral o SC |
Meloxicam | 0,1 mg/kg día 1, luego 0,05 mg/kg/24 h | 0,05 mg/kg/24 h | Oral o SC |
Buprenorfina | 0,01–0,02 mg/kg cada 6–8 h | 0,02 mg/kg cada 8–12 h | SC, IM, IV, transmucosa |
Metadona | 0,2–0,3 mg/kg cada 4–6 h | 0,1–0,2 mg/kg cada 4–6 h | IV o IM |
Dexmedetomidina | 1–5 µg/kg cada 4–6 h (bajo monitoreo) | 2–4 µg/kg cada 6 h | IV, IM o CRI |
Ketamina (CRI) | 10–20 µg/kg/min | 5–10 µg/kg/min | Infusión IV continua |
Lidocaína (CRI) | 25–50 µg/kg/min | No recomendada | Infusión IV |
Robenacoxib | No aplica | 1 mg/kg/24 h | Oral (máx. 6 días) |
Conclusión
El manejo del dolor postoperatorio requiere planificación, conocimiento farmacológico y atención personalizada a cada paciente. No hay una única combinación válida, sino múltiples opciones que deben adaptarse al tipo de cirugía, al estado del animal y a las condiciones de cada tutor. Usar analgesia multimodal es la mejor estrategia para asegurar confort, acelerar la recuperación y mejorar el vínculo entre el animal, su tutor y el equipo veterinario.
Referencias
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- Taylor, P. M., & Robertson, S. A. (2018). Analgesia in dogs and cats: an update. Practice, 40(8), 401–412.
- Plumb, D. C. (2023). Plumb’s Veterinary Drug Handbook (9th ed.). Wiley-Blackwell.
- WSAVA Global Pain Council. (2022). Global Guidelines for the Recognition, Assessment and Treatment of Pain. World Small Animal Veterinary Association.