La balanitis es una inflamación del glande peneano, que en perros rara vez aparece de forma aislada, y suele presentarse junto con postitis (inflamación del prepucio), dando lugar al término más habitual en la práctica clínica: balanopostitis.
Se trata de una patología frecuente pero poco reportada, y su abordaje requiere una combinación de diagnóstico clínico, tratamiento local y sistémico, y prevención de recidivas mediante higiene y control de factores predisponentes.
Aunque suele tener carácter leve, el sangrado, la secreción prepucial o la excesiva lamida del área genital preocupan a los tutores y pueden interferir con el confort del animal o con su comportamiento reproductivo.
Fisiología normal del pene y el prepucio
En condiciones normales, el pene del perro permanece dentro del prepucio, recubierto por una fina capa de moco claro o ligeramente blanquecino que actúa como lubricante fisiológico. No debe confundirse con secreción patológica.
La flora microbiana prepucial incluye bacterias comensales como E. coli, Proteus spp., Mycoplasma spp. o Staphylococcus spp., que no causan enfermedad si se mantiene el equilibrio inmunitario y ambiental.
Causas de balanitis y factores predisponentes
La inflamación del glande puede deberse a múltiples causas:
Infecciosas
- Bacterianas: sobrecrecimiento de flora saprofita o infección secundaria tras trauma
- Fúngicas: Candida spp., en casos de inmunosupresión o corticoterapia prolongada
- Viral: excepcional, aunque se ha descrito en casos de herpesvirus canino
Traumáticas
- Monta excesiva (en perros enteros o con hiperestrogenismo)
- Autotraumatismo por lamido compulsivo
- Cuerpos extraños prepuciales
Alérgicas o irritativas
- Contacto con productos de limpieza, vegetación, productos tópicos
- Reacciones locales a ciertos medicamentos
Anatómicas
- Fimosis o parafimosis que dificultan la exposición y limpieza del glande
- Prepucio excesivamente estrecho o hendido
Sistémicas o secundarias
- Enfermedades endocrinas (hipotiroidismo, Cushing)
- Tumores peneanos (más comunes en animales geriátricos o no castrados)
Signos clínicos más frecuentes
Los signos de balanitis pueden variar según la intensidad y la duración del proceso:
- Secreción prepucial mucosa, purulenta o sanguinolenta
- Inflamación visible del glande (si protruye o se exterioriza)
- Enrojecimiento, ulceración o costras en la mucosa peneana
- Lamido excesivo, incomodidad, inquietud
- Disuria o micción anormal (si hay dolor o edema severo)
- En casos crónicos: fibrosis, adherencias o hiperplasia prepucial
Diagnóstico clínico
El diagnóstico se basa en la combinación de:
- Anamnesis detallada: edad, estado reproductivo, conducta sexual, acceso a hembras
- Examen físico: exteriorización del pene, evaluación del prepucio, palpación del glande
- Citología de secreción prepucial: para identificar tipo celular, presencia de bacterias, levaduras o neutrófilos
- Cultivo bacteriano o fúngico, especialmente en casos recurrentes
- Biopsia (si hay masas, ulceraciones persistentes o mala respuesta al tratamiento)
- Ecografía abdominal: para evaluar próstata en casos persistentes o recidivantes
Diagnóstico diferencial
Es importante diferenciar la balanitis de otras entidades clínicas que afectan al área genital masculina:
Patología | Características distintivas |
Balanopostitis | Inflamación de glande + prepucio |
Parafimosis | Pene exteriorizado que no puede reintroducirse |
Tumor peneano | Masa visible, ulcerada o hemorrágica |
Prostatitis | Disuria, fiebre, dolor abdominal, secreción prepucial |
Trauma o cuerpo extraño | Historia de exposición, exploración dolorosa |
Tratamiento médico y local
El tratamiento se adapta al tipo de lesión, gravedad y causa subyacente.
Manejo tópico (fundamental)
- Limpiezas prepuciales diarias con suero fisiológico tibio
- Aplicación de antisépticos suaves (clorhexidina al 0.05%, yodo diluido)
- Cremas antibióticas o antifúngicas tópicas (gentamicina, mupirocina, clotrimazol)
- Higiene diaria si el paciente convive con otros animales o tiene exposición al exterior
Antibióticos sistémicos (en infecciones confirmadas)
Antibiótico | Dosis en perros | Comentario clínico |
Cefalexina | 20–30 mg/kg cada 12 h VO | Amplio espectro, buena tolerancia |
Amoxicilina-clavulánico | 12.5–25 mg/kg cada 12 h VO | Infecciones mixtas, cobertura extendida |
Enrofloxacina | 5 mg/kg cada 24 h VO | Casos resistentes, tras antibiograma |
Duración: mínimo 7–10 días, prolongable hasta 14 en casos crónicos.
Tratamiento complementario
- Collar isabelino: imprescindible para evitar lamido
- Analgesia (meloxicam 0.1 mg/kg/día) si hay inflamación evidente
- Castración: recomendada en machos enteros con balanitis recurrente de origen hormonal o comportamiento sexual excesivo
Casos especiales
En perros geriátricos o con secreción prepucial persistente, es imprescindible descartar:
- Hiperplasia prostática benigna
- Adenomas o adenocarcinomas peneanos o prepuciales
- Tumores transmisibles venéreos (TVT) en perros no castrados con historia de monta libre
En estos casos, la intervención quirúrgica (castración, extirpación de lesiones o incluso penectomía parcial) puede estar indicada.
Prevención y seguimiento
- Mantener higiene regular del prepucio en razas con pliegues excesivos (Bulldog, Shar Pei)
- Castración temprana en animales no destinados a reproducción
- Evitar contacto con hembras en celo si no se desea reproducción
- Control veterinario en casos de secreción persistente >7 días
Conclusión
La balanitis en perros, aunque muchas veces leve, puede ser molesta y recurrente si no se aborda correctamente. El tratamiento se basa en higiene local rigurosa, identificación de la causa subyacente y terapia antibiótica o antifúngica adecuada, acompañada de medidas de control del comportamiento y prevención de recidivas.
El papel del veterinario está en distinguir entre inflamación benigna transitoria y procesos crónicos que pueden indicar patología sistémica, hormonal o tumoral. Un enfoque integral, diagnóstico precoz y seguimiento clínico aseguran una resolución completa y duradera.
Referencias
- Johnston, S. D., Root Kustritz, M. V., & Olson, P. N. S. (2001). Canine and Feline Theriogenology. Saunders
- Griffin, C. E. (2018). Current Veterinary Dermatology: The Science and Art (5ª ed.). Elsevier
- Plumb, D. C. (2022). Plumb’s Veterinary Drug Handbook (10ª ed.). Wiley-Blackwell
- Romagnoli, S. E., & Luvoni, G. C. (2019). Balanopostitis en el perro macho: causas y manejo clínico. Veterinary Reproduction Journal, 27(2), 101–108
- MSD Veterinary Manual. (2023). Balanopostitis en perros y gatos