En los últimos años, el metamizol sódico —más conocido por su nombre comercial Nolotil®— ha suscitado un creciente interés en medicina veterinaria como analgésico-antipirético alternativo a los AINEs tradicionales.
Aunque su uso en animales no está oficialmente autorizado, es bien conocido por los clínicos que lo emplean off-label con criterios prudentes, especialmente en situaciones en las que otros analgésicos están contraindicados.
En veterinaria, Nolotil representa una opción interesante para perros y, en menor medida, para gatos, pero siempre bajo prescripción y supervisión, debido a sus posibles efectos adversos y a su metabolismo particular en cada especie.
¿Qué es el metamizol y cómo actúa?
El metamizol es un derivado pirazolónico con potente acción analgésica y antipirética, y leve efecto antiinflamatorio. Su mecanismo exacto no se conoce del todo, pero se cree que actúa:
- Inhibiendo la síntesis de prostaglandinas a nivel central y periférico.
- Modulando vías descendentes del dolor.
- Activando sistemas endocannabinoides.
A diferencia de los AINEs clásicos, su acción no está ligada a la inhibición de la COX-1 ni COX-2 de forma selectiva, lo que le confiere menor toxicidad gástrica y renal.
Indicaciones clínicas en perros y gatos
En medicina veterinaria, el metamizol puede ser útil en:
- Dolor visceral moderado, especialmente gastrointestinal, hepático o urogenital.
- Dolor postoperatorio leve-moderado, cuando no se toleran AINEs.
- Fiebre refractaria, de origen inflamatorio o infeccioso.
- Casos puntuales de cólicos en pequeños animales.
No debe utilizarse como primera elección en dolor osteoarticular, ya que carece de efecto antiinflamatorio sostenido.
Dosis segura y formas de administración
Nolotil está disponible en formulación inyectable (solución 500 mg/ml). Su uso es extrafarmacopéico en veterinaria, por lo que debe ser siempre prescrito bajo responsabilidad profesional.
Perros
- Dosis IV o IM: 20–50 mg/kg cada 8–12 h
- Vía oral (poco habitual): 25–30 mg/kg cada 12 h
Ejemplo: perro de 20 kg
→ 1 ml (500 mg) cada 12 h por vía IM o IV lenta.
Gatos
- Dosis IV muy limitada: 10–20 mg/kg cada 12–24 h
- Solo bajo monitorización hospitalaria
- NO recomendado como tratamiento ambulatorio por riesgo de toxicidad y pobre capacidad de conjugación hepática
Consideraciones y precauciones
El uso de metamizol debe limitarse a casos puntuales y con buen seguimiento. Aunque tiene un perfil de seguridad digestiva superior al de los AINEs, no está exento de efectos adversos.
Efectos adversos posibles:
- Hipotensión (especialmente en administración IV rápida)
- Reacciones alérgicas o anafilaxia (raras)
- Agranulocitosis (muy poco frecuente, pero grave en humanos; sin datos claros en perros/gatos)
- Depresión del SNC en gatos con sobredosis
Contraindicaciones:
- Hipersensibilidad conocida a pirazolonas
- Hipotensión o hipovolemia
- Embarazo y lactancia
- Evitar su uso conjunto con AINEs o corticoides
Comparativa clínica con otros analgésicos
Fármaco | Tipo | Especie | Dosis habitual | Comentario clínico |
Metamizol (Nolotil) | Analgésico-antipirético | Perro/gato | 20–50 mg/kg IV/IM c/8–12 h | Buena opción en fiebre refractaria o dolor visceral |
Meloxicam | AINE | Perro/gato | 0.1 mg/kg/día | Dolor inflamatorio, osteoarticular |
Tramadol | Opioide leve | Perro | 2–4 mg/kg c/8–12 h | Dolor crónico o postoperatorio |
Paracetamol | Analgésico | Perro | 10–15 mg/kg c/8–12 h | Alternativa puntual a AINEs (no en gatos) |
Protocolo clínico práctico: dolor visceral agudo en perro
- Valoración clínica y descartar contraindicación renal o hepática.
- Administrar Nolotil 25 mg/kg IV lenta.
- Reevaluar a las 4–6 h. Si hay buena respuesta, continuar cada 12 h durante 1–2 días.
- Transicionar a AINE o analgésico oral cuando sea posible.
Ejemplo: perro con dolor abdominal tras pancreatitis leve → buena respuesta sin necesidad de añadir tramadol o butorfanol.
En gatos: precauciones extremas
Los gatos metabolizan el metamizol de forma lenta y con alto riesgo de acumulación. Su uso debe limitarse a:
- Hospitalización controlada
- Dosis únicas o de corta duración
- Monitorización de signos neurológicos, mucosas y función hepática
Por todo ello, la recomendación general es evitar el uso sistemático en gatos, salvo en condiciones muy concretas y con alternativas limitadas.
Conclusión
Nolotil (metamizol sódico) puede ser un recurso analgésico y antipirético útil en perros, especialmente en casos de dolor visceral o fiebre refractaria, y como alternativa en pacientes que no toleran AINEs.
En gatos, su uso debe ser extraordinariamente cuidadoso y, en la mayoría de los casos, evitado por seguridad.
No es un fármaco para uso cotidiano, pero sí una opción terapéutica válida en protocolos controlados, con criterio y supervisión, como parte del enfoque multimodal de la analgesia veterinaria.
Referencias
- Papich, M. G. (2021). Saunders Handbook of Veterinary Drugs (5ª ed.). Elsevier
- Plumb, D. C. (2022). Plumb’s Veterinary Drug Handbook (10ª ed.). Wiley-Blackwell
- Monteiro-Steagall, B. P., et al. (2013). Analgesia multimodal en medicina veterinaria. Vet Clin North Am Small Anim Pract, 43(5), 1103–1116
- EMA. (2022). Safety of metamizole use in animals. Pharmacovigilance Report
- Sousa, M. G., et al. (2015). Evaluation of the use of metamizol in dogs with colic and fever. Revista Brasileira de Ciência Veterinária, 22(1), 18–24