La piometra es una afección uterina grave que afecta a las perras y que hay que tratar de forma rápida para poner a salvo las vidas de las pacientes. Se clasifica en dos tipos: piometra cerrada y piometra abierta, cada una con características y desafíos específicos.
A lo largo de este artículo, vamos a ver cómo diferenciar estos dos tipos de piometra, identificar las perras con mayor predisposición, realizar diagnósticos precisos y aplicar tratamientos adecuados. ¡Coge papel y boli que lo vas a necesitar!
¿Qué es la piometra?
La piometra es una infección uterina que se desarrolla debido a cambios hormonales y la presencia de bacterias. Suele ocurrir en perras no esterilizadas y puede presentarse en dos formas:
- Piometra cerrada: El cuello uterino está cerrado, lo que impide la salida del contenido purulento.
- Piometra abierta: El cuello uterino está abierto, permitiendo la salida de pus a través de la vulva.
Diferenciación entre piometra cerrada y abierta
Los signos clínicos de estos dos tipos de piometra son diferentes, y es importante tener claro los más relevantes:
Piometra cerrada
- Síntomas: Letargo, fiebre, abdomen distendido, vómitos, y anorexia. No hay descarga vulvar evidente.
- Riesgo: Mayor riesgo de ruptura uterina y peritonitis, ya que el pus se acumula dentro del útero.
Piometra abierta
- Síntomas: Descarga purulenta o sanguinolenta desde la vulva, junto con letargo y fiebre. El abdomen puede no estar tan distendido.
- Riesgo: Menor riesgo de ruptura uterina, pero aún puede ser grave si no se trata.
Perras con mayor predisposición
La piometra es más común en perras de mediana edad a mayores, especialmente en aquellas que no han sido esterilizadas. Perras que han recibido tratamientos hormonales, como anticonceptivos o terapias de reemplazo hormonal, también están en mayor riesgo. Además, ciertas razas parecen ser más susceptibles, incluyendo Golden Retrievers, Labrador Retrievers, y Rottweilers.
Diagnóstico de piometra
Aunque los signos clínicos en muchas ocasiones nos pueden dar grandes pistas acerca de que la paciente padece piometra, es importante realizarle las pruebas oportunas, que incluyen:
Exploración física
Realizar una exploración física detallada es crucial. En el caso de la piometra abierta, la descarga vulvar es un indicativo clave. En la piometra cerrada, el abdomen distendido y doloroso puede ser una pista importante.
Pruebas diagnósticas
Hemograma completo
Un hemograma puede revelar leucocitosis con desviación a la izquierda, que es indicativo de infección.
Bioquímica sanguínea
Puede mostrar elevaciones en los niveles de urea y creatinina si hay afectación renal secundaria.
Radiografía y ecografía abdominal
- Radiografía: Puede mostrar un útero distendido.
- Ecografía: Es la herramienta más precisa para diagnosticar la piometra. Permite visualizar el contenido uterino y diferenciar entre piometra abierta y cerrada.
Tratamientos para piometra
Dependiendo del tipo de piometra, existen diferentes tipos de tratamientos:
Tratamiento de piometra cerrada
Ovariohisterectomía (OHE)
La cirugía es el tratamiento de elección para la piometra cerrada. La ovariohisterectomía elimina la fuente de infección.
- Premedicación: Cefazolina a 22 mg/kg IV como profilaxis antibiótica.
- Fluidos intravenosos: Solución salina isotónica para mantener la hidratación y la presión sanguínea.
- Anestesia: Se utilizarán agentes anestésicos adecuados según el estado del paciente.
Tratamiento médico (en casos seleccionados)
- Antibióticos: Amoxicilina-clavulanato a 20 mg/kg cada 12 horas IV.
- Prostaglandinas: Para inducir la apertura del cuello uterino y expulsar el contenido purulento, aunque este método tiene un riesgo alto de complicaciones y no es recomendado como tratamiento principal.
Tratamiento de piometra abierta
Manejo médico inicial
- Antibióticos: Amoxicilina-clavulanato a 20 mg/kg cada 12 horas IV.
- Fluidos intravenosos: Solución salina isotónica para corregir la deshidratación y mantener la función renal.
Ovariohisterectomía (OHE)
Aunque la piometra abierta puede parecer menos urgente, la OHE sigue siendo el tratamiento definitivo para prevenir recurrencias y complicaciones graves.
Tabla comparativa de piometra cerrada y abierta
En esta tabla vemos un resumen entre la piometra cerrada vs. piometra abierta:
Característica | Piometra cerrada | Piometra abierta |
Síntomas | Letargo, fiebre, abdomen distendido, vómitos | Descarga vulvar purulenta, letargo, fiebre |
Diagnóstico | Hemograma, bioquímica sanguínea, ecografía | Hemograma, bioquímica sanguínea, ecografía |
Riesgo | Alto riesgo de ruptura uterina y peritonitis | Menor riesgo de ruptura uterina |
Tratamiento principal | Ovariohisterectomía | Ovariohisterectomía |
Tratamiento médico inicial | Antibióticos, prostaglandinas (casos seleccionados) | Antibióticos, fluidos intravenosos |
Premedicación quirúrgica | Cefazolina a 22 mg/kg IV | Cefazolina a 22 mg/kg IV |
Fluidos intravenosos | Solución salina isotónica | Solución salina isotónica |
Conclusión
Diferenciar entre piometra cerrada y abierta es primordial para determinar el mejor enfoque de tratamiento, sobre todo a la hora de estabilizar a la paciente. La ovariohisterectomía sigue siendo el tratamiento definitivo para ambas formas, con protocolos de manejo médico para estabilizar al paciente antes de la cirugía.
¿Conocías todas estas diferencias entre piometra abierta y cerrada? ¡Cuéntanos!
Referencias
- Ettinger, S. J., & Feldman, E. C. (2017). Textbook of Veterinary Internal Medicine. Elsevier.
- Nelson, R. W., & Couto, C. G. (2014). Medicina Interna de Pequeños Animales. Elsevier España.
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- Johnston, S. D., Root Kustritz, M. V., & Olson, P. N. (2001). Canine and Feline Theriogenology. Saunders.