La incontinencia urinaria en perros es una condición que se caracteriza por la pérdida involuntaria de orina en momentos inapropiados, lo que puede resultar molesto tanto para los responsables del animal como para el perro mismo.
A diferencia de la micción voluntaria, donde el perro controla cuándo orinar, en la incontinencia el animal no puede evitar que la orina se escape, ya sea de forma constante o intermitente.
Esta condición puede estar asociada a problemas en el sistema nervioso, el tracto urinario o a factores hormonales, especialmente en perros mayores o en hembras esterilizadas. Vamos a ver cuáles son las causas más comunes de la incontinencia urinaria, cómo diagnosticarla correctamente y las opciones de tratamiento disponibles para mejorar la calidad de vida del perro afectado.
¿Qué es la incontinencia urinaria en perros?
La incontinencia urinaria se define como la pérdida involuntaria del control sobre la vejiga, lo que provoca escapes o goteos de orina, incluso cuando el perro está en reposo. Esta condición no debe confundirse con problemas de comportamiento, ya que en la incontinencia existe un problema físico o funcional que impide el control adecuado de la vejiga.
Dependiendo de la causa, la incontinencia puede ser leve, con pequeñas fugas de orina, o más grave, con una pérdida continua y significativa de control. Es un problema más común en perros mayores, pero también puede afectar a perros jóvenes debido a malformaciones congénitas o problemas neurológicos.
Causas de la incontinencia urinaria en perros
Entre las causas que hay detrás de la incontinencia urinaria se encuentran:
1. Déficit hormonal en hembras esterilizadas
La causa más frecuente de incontinencia urinaria en hembras esterilizadas es la incontinencia por incompetencia del esfínter uretral. Tras la esterilización, los niveles de estrógenos disminuyen, lo que debilita el tono del esfínter de la vejiga y permite que la orina se escape, especialmente cuando la perra está en reposo o dormida.
2. Infecciones del tracto urinario (ITU)
Las infecciones bacterianas del tracto urinario irritan la vejiga, provocando urgencia y escapes involuntarios de orina. Otros síntomas incluyen aumento en la frecuencia de micción, presencia de sangre en la orina y dolor al orinar.
3. Problemas neurológicos
Alteraciones en el sistema nervioso que afectan los nervios responsables del control de la vejiga pueden provocar incontinencia. Entre las causas más comunes se encuentran:
- Lesiones medulares: Traumatismos en la columna vertebral.
- Enfermedades degenerativas: Como la mielopatía degenerativa en perros mayores.
- Compresión de nervios: Hernias discales que afectan el control neuromuscular.
4. Malformaciones congénitas
Algunos perros nacen con anomalías en el tracto urinario que predisponen a la incontinencia desde una edad temprana, como:
- Ectopia ureteral: Los uréteres desembocan en una posición anormal, provocando fugas constantes de orina.
- Hipoplasia de la vejiga: Desarrollo insuficiente de la vejiga urinaria.
5. Cálculos o tumores en la vejiga
La presencia de cálculos urinarios o tumores puede obstruir el flujo normal de la orina, causando irritación y pérdida de control sobre la vejiga.
6. Síndrome de vejiga hiperactiva
Algunas condiciones pueden provocar contracciones involuntarias de la vejiga, lo que resulta en escapes frecuentes de pequeñas cantidades de orina.
7. Obesidad
El exceso de peso contribuye a una mayor presión sobre la vejiga, debilitando el tono muscular y predisponiendo a la incontinencia.
Síntomas de la incontinencia urinaria en perros
La incontinencia urinaria se manifiesta con signos clínicos claros que los responsables pueden identificar fácilmente:
- Goteo continuo o intermitente de orina.
- Manchas húmedas en la cama o áreas donde el perro descansa.
- Lamerse continuamente la zona genital.
- Irritación de la piel alrededor del área perineal debido al contacto constante con la orina.
- Olor fuerte a orina en el pelaje del perro.
- Aumento de las micciones si existe una infección secundaria.
En algunos casos, la incontinencia puede pasar desapercibida inicialmente, ya que el perro se limpia las fugas de manera constante.
Diagnóstico de la incontinencia urinaria en perros
El diagnóstico de la incontinencia urinaria requiere un enfoque integral para identificar la causa subyacente y establecer el tratamiento adecuado.
1. Historia clínica y exploración física
Se evalúan la frecuencia de los escapes, cuándo ocurren y si se asocian a situaciones específicas (como reposo o actividad física). Además, se examina la zona perineal en busca de signos de irritación.
2. Análisis de orina
El análisis de orina permite identificar infecciones del tracto urinario, cristales, sangre o inflamación, que podrían estar contribuyendo a la incontinencia.
3. Pruebas de imagen
- Ecografía abdominal: Ayuda a evaluar el tamaño y la estructura de la vejiga y detectar malformaciones congénitas o cálculos.
- Radiografías contrastadas: Útiles para diagnosticar ectopia ureteral o tumores en el tracto urinario.
- Tomografía computarizada (TAC): En casos complejos, permite una visualización más detallada del sistema urinario y nervioso.
4. Evaluación neurológica
Si se sospechan problemas neurológicos, se realizarán pruebas específicas para evaluar la función nerviosa y la salud de la médula espinal.
Tratamiento de la incontinencia urinaria en perros
El tratamiento dependerá de la causa subyacente y puede incluir terapias médicas, quirúrgicas o cambios en el manejo diario del perro.
Causa | Tratamiento recomendado | Objetivo |
Déficit hormonal (hembras) | Estriol (Incurin) o fenilpropanolamina | Mejorar el tono del esfínter uretral |
Infección urinaria | Antibióticos según antibiograma | Eliminar la infección bacteriana |
Ectopia ureteral | Cirugía correctiva | Reposicionar los uréteres anormales |
Problemas neurológicos | Terapia física y medicación específica | Restaurar la función neuromuscular |
Cálculos o tumores | Cirugía o dieta específica | Eliminar la obstrucción |
Vejiga hiperactiva | Antiespasmódicos (oxibutinina) | Reducir las contracciones involuntarias |
Cuidados complementarios en casa
Además del tratamiento veterinario, hay medidas que las familias pueden implementar para mejorar el manejo de la incontinencia urinaria:
- Asegurar accesos frecuentes al exterior para facilitar la evacuación voluntaria de la orina.
- Colocar empapadores o pañales especiales para perros en casos de incontinencia severa.
- Mantener una higiene adecuada en la zona perineal para evitar irritaciones y dermatitis.
- Garantizar que el perro tenga agua fresca disponible para mantener una buena hidratación y salud renal.
- Promover el control del peso corporal para evitar presión adicional sobre la vejiga.
Prevención de la incontinencia urinaria
Aunque no siempre es posible prevenir la incontinencia, algunos cuidados pueden reducir el riesgo:
- Realizar revisiones veterinarias periódicas para detectar problemas urinarios o hormonales a tiempo.
- Garantizar una hidratación adecuada para mantener un sistema urinario saludable.
- Supervisar la alimentación para evitar la formación de cálculos urinarios.
- Evitar obesidad, ya que contribuye a la debilidad muscular en el tracto urinario.
Fuentes consultadas
- Nelson, R. W., & Couto, C. G. (2020). Small Animal Internal Medicine. Elsevier.
- Fossum, T. W. (2018). Small Animal Surgery. Elsevier.
- Barsanti, J. A. (2012). “Urinary incontinence in dogs: Diagnosis and management.” Veterinary Clinics of North America.
- Plumb, D. C. (2018). Plumb’s Veterinary Drug Handbook. Wiley-Blackwell.
American College of Veterinary Internal Medicine (ACVIM). (2023). Clinical Guidelines for Urinary Disorders in Dogs.