Las heridas en gatos son un motivo frecuente de consulta veterinaria, ya sea por traumatismos, mordeduras, caídas o intervenciones quirúrgicas. La cicatrización adecuada depende de un manejo cuidadoso y basado en principios científicos.
Este artículo profundiza en la fisiología de la cicatrización, los tipos de heridas, su manejo clínico y las últimas recomendaciones para una cura óptima. ¡Aprende todo lo que necesitas acerca de la cura de heridas en gatos!
Fisiología de la cicatrización
La cicatrización de heridas en gatos sigue un proceso complejo que incluye cuatro fases principales:
- Hemostasia: Ocurre inmediatamente tras la lesión, con la formación del coágulo mediante la activación plaquetaria y la cascada de coagulación.
- Inflamación: Se inicia en las primeras 24-48 horas. Los neutrófilos y macrófagos limpian la herida y liberan citoquinas para estimular la reparación.
- Proliferación: Entre los días 3 y 10, ocurre la formación de tejido de granulación, angiogénesis y reepitelización.
- Remodelación: Puede prolongarse semanas o meses, con maduración del colágeno y fortalecimiento de los tejidos.
Clasificación de heridas
La correcta clasificación de las heridas es esencial para determinar el manejo adecuado:
- Heridas abiertas: Incluyen laceraciones, abrasiones y heridas penetrantes.
- Heridas cerradas: Hematomas, contusiones o abscesos subcutáneos.
- Heridas limpias: Producidas en entornos estériles, como durante una cirugía.
- Heridas contaminadas: Contienen bacterias, pero sin signos de infección activa.
- Heridas infectadas: Presentan inflamación, exudado purulento y signos sistémicos en casos graves.
Manejo inicial de las heridas en gatos
El manejo clínico debe basarse en una evaluación exhaustiva de la herida y del estado general del paciente.
Exploración inicial
- Historia clínica: Recopilar detalles sobre el mecanismo de la lesión, tiempo transcurrido y tratamientos previos.
- Evaluación general: Identificar signos de shock, anemia o infecciones sistémicas.
- Examen local: Determinar la profundidad, extensión y nivel de contaminación.
Procedimientos iniciales
- Control del sangrado: Aplicar presión directa con gasas estériles. En casos graves, considerar ligaduras o torniquetes temporales.
- Desbridamiento: Eliminar tejido desvitalizado utilizando bisturí o tijeras quirúrgicas.
- Lavado: Realizar un lavado abundante con solución salina estéril o Ringer lactato. La presión óptima se logra utilizando una jeringa de 35 ml con aguja de calibre 18.
Opciones de cierre de heridas
El método de cierre depende de la clasificación de la herida:
- Cierre primario: Indicado en heridas limpias, recientes y sin signos de infección.
- Cierre diferido: Utilizado en heridas contaminadas, tras un periodo de tratamiento tópico.
- Cierre por segunda intención: Para heridas extensas o infectadas, dejando que cicatricen mediante contracción y epitelización.
Productos y técnicas avanzadas para la cura de heridas
A la hora de hacer un adecuado abordaje, tenemos a nuestra disposición productos y técnicas avanzadas que van a ayudar a la mejora de nuestros pacientes felinos. Entre las más comunes y las de mayor efectividad tenemos:
Apósitos y vendajes
Los apósitos desempeñan un papel crucial en la protección y cicatrización de las heridas:
- Apósitos hidrocoloides: Promueven un ambiente húmedo y favorecen la reepitelización.
- Apósitos de plata: Poseen propiedades antimicrobianas, ideales para heridas infectadas.
- Vendajes de espuma: Absorben exudado y reducen la maceración del tejido sano.
Terapias avanzadas
- Terapia con láser de baja intensidad: Estimula la proliferación celular y reduce la inflamación.
- Terapia de presión negativa (TPN): Utilizada en heridas extensas o con alto exudado, mejora la perfusión y acelera la formación de tejido de granulación.
- Factores de crecimiento: Como el factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF), que potencia la reparación tisular.
Uso de antimicrobianos
El manejo farmacológico también puede ser necesario en algunos casos. Entre los antimicrobianos los clasificamos entre los tópicos y sistémicos, dependiendo del tipo de herida y del estado general del gato que estamos tratando.
Antibióticos tópicos
- Mupirocina: Útil en infecciones por Staphylococcus sensibles.
- Sulfadiazina de plata: Amplio espectro, excelente para quemaduras y heridas contaminadas.
Antibióticos sistémicos
El uso sistémico debe limitarse a heridas infectadas o con riesgo de diseminación bacteriana. Las opciones incluyen:
- Amoxicilina-ácido clavulánico: 20-40 mg/kg cada 12 horas.
- Cefalexina: 20-30 mg/kg cada 8-12 horas.
- Enrofloxacino: 5-10 mg/kg cada 24 horas (en casos específicos).
Control del dolor
La analgesia es fundamental en cualquier protocolo de cura de heridas:
- AINEs como meloxicam (0,05 mg/kg VO) o carprofeno (2-4 mg/kg VO).
- Analgésicos opioides como buprenorfina (0,01-0,02 mg/kg SC).
Complicaciones frecuentes y su manejo
Las complicaciones más comunes incluyen:
- Infecciones persistentes: Requieren ajustes en el tratamiento antibiótico basado en cultivos y antibiogramas.
- Dehiscencia: Puede prevenirse mediante una técnica quirúrgica adecuada y una buena adherencia al posoperatorio.
- Formación de tejido de granulación excesivo: Manejado con corticoesteroides tópicos o desbridamiento selectivo.
Casos clínicos relevantes
Por aquí te contamos algunos casos clínicos relevantes que te pueden ser de gran utilidad para tener en cuenta el manejo el la cura de heridas en gatos.
Caso 1: Laceración profunda en miembro posterior
Un gato de 3 años presenta una laceración contaminada de 10 cm. Se realizó lavado con solución salina, desbridamiento y cierre diferido con apósitos hidrocoloides. La cicatrización completa se logró en 15 días sin complicaciones.
Caso 2: Absceso por mordedura
Un gato macho no castrado de 5 años con absceso subcutáneo en la zona cervical. Tratado con drenaje quirúrgico, antibióticos sistémicos (amoxicilina-ácido clavulánico) y curas diarias con sulfadiazina de plata.
Conclusión
La cura de heridas en gatos requiere un enfoque basado en el conocimiento de la fisiología de la cicatrización, las técnicas de manejo avanzado y una selección adecuada de productos y medicamentos. La atención al detalle y una evaluación constante son esenciales para garantizar resultados exitosos.
Referencias
- Fossum, T.W. (2019). Small Animal Surgery. Elsevier.
- Plumb, D.C. (2021). Plumb’s Veterinary Drug Handbook. Wiley-Blackwell.
- Ettinger, S.J., & Feldman, E.C. (2017). Textbook of Veterinary Internal Medicine. Elsevier.