La hernia perineal es una de las patologías quirúrgicas más frecuentes en perros geriátricos, especialmente machos no castrados. Se trata de un fallo estructural de los músculos del diafragma pélvico, que permite la protrusión de órganos abdominales o pélvicos en el espacio perineal.
Su presentación puede variar desde una deformación visible hasta cuadros de disuria, retención fecal o incluso shock por incarceración.
El tratamiento definitivo es quirúrgico, pero un manejo integral incluye diagnóstico temprano, estabilización preoperatoria, elección técnica individualizada y seguimiento estricto en el posoperatorio.
¿Qué es una hernia perineal?
Es la protrusión de vísceras (recto, próstata, vejiga, grasa, intestino) hacia el espacio perineal, entre el músculo elevador del ano, el obturador interno y el esfínter anal externo.
Causas predisponentes
- Degeneración muscular por andrógenos (machos enteros >7 años)
- Estreñimiento crónico o disquecia
- Hiperplasia prostática benigna (HPB)
- Tenesmo secundario (cistitis, litiasis)
- Anomalías congénitas del diafragma pélvico
- Atrofia muscular idiopática
Razas más afectadas
Raza | Predisposición |
Boston Terrier | Alta |
Boxer | Alta |
Pekingese | Moderada |
Cocker Spaniel | Moderada |
Poodle miniatura | Baja |
Pastor Alemán | Baja |
Aunque menos común en hembras, también puede aparecer, sobre todo si hay aumento de presión intraabdominal o tras traumatismos.
Signos clínicos
La presentación varía según el contenido herniado y la evolución. En muchos casos, el diagnóstico se retrasa por la banalización de los signos.
Síntomas frecuentes:
- Tumefacción unilateral (o bilateral) en región perineal
- Dificultad para defecar (disquecia, tenesmo, estreñimiento)
- Incontinencia fecal o postura anormal al evacuar
- Retención urinaria (si se hernia vejiga o próstata)
- Letargia, anorexia o dolor abdominal si hay incarceración
Diagnóstico
El diagnóstico es esencialmente clínico, aunque puede complementarse con pruebas de imagen y laboratorios.
Pasos diagnósticos recomendados:
- Palpación rectal digital: permite evaluar defecto muscular, asimetría o desplazamiento del recto
- Ecografía abdominal: detecta si hay vejiga, próstata o grasa herniada
- Radiografía simple o contraste: define contenido herniado
- Hemograma y bioquímica: valorar función renal si hay retención urinaria
- Ecocardiografía si hay indicios de bradicardia (reflejo vagal)
Clasificación clínica
Tipo de hernia | Descripción |
Unilateral | La más común; en lado derecho o izquierdo |
Bilateral | En ambos lados; más difícil de corregir |
Reducible | Se puede recolocar el contenido herniado |
Incarcerada | No se puede reducir, riesgo de necrosis |
Con vejiga/recto | Mayor urgencia quirúrgica y riesgo vital |
Tratamiento
El tratamiento de la hernia perineal consta de diferentes pasos:
Estabilización preoperatoria
Antes de la cirugía, es fundamental corregir:
- Desequilibrios hidroelectrolíticos (si hay vómitos o disuria)
- Infección urinaria o prostatitis (si se hernia vejiga o próstata)
- Dolor y disquecia (con laxantes, enema suave, analgesia)
Manejo médico (temporal)
Medida | Indicaciones |
Dieta rica en fibra | Para facilitar defecación |
Lactulosa | 0.5–1 ml/kg cada 8–12 h VO |
Enemas suaves | Cada 24–48 h, hasta cirugía |
Castración | En conjunto con cirugía para evitar recidiva |
Cirugía correctiva
El tratamiento definitivo es quirúrgico. Existen varias técnicas, siendo las más utilizadas:
1. Reconstrucción con sutura del diafragma pélvico
- Indicada en hernias sin atrofia severa
- Se suturan músculo elevador del ano, obturador interno y esfínter
2. Transposición del músculo obturador interno
- Técnica más eficaz, permite cubrir el defecto sin tensión
- Mayor tasa de éxito y menor recidiva
3. Cistopexia y colopexia
- En casos con desplazamiento de vejiga o recto
- Requieren laparotomía previa
4. Uso de malla sintética (casos graves o recidivas)
- Para defectos amplios, aunque con más complicaciones
Complicaciones quirúrgicas
Complicación | Frecuencia estimada | Comentario |
Recidiva herniaria | 10–15% | Disminuye con castración |
Incontinencia fecal | <5% | Generalmente transitoria |
Fístulas o abscesos | <5% | Control con antibioterapia |
Parálisis del nervio pudendo | Rara | Cuadro neurológico asociado |
Protocolo postoperatorio
- Antibiótico profiláctico (amoxi-clavulánico o cefalexina 7–10 días)
- Analgesia multimodal: AINE + opioides suaves (tramadol 2–4 mg/kg cada 8 h)
- Laxantes suaves (lactulosa) durante 7–14 días
- Control de micción y revaluación de la vejiga si hubo hernia urinaria
- Revisiones cada 7–10 días durante el primer mes
- Retirada de suturas en 10–14 días si no hay complicaciones
Pronóstico
El pronóstico es bueno a excelente si se realiza la corrección quirúrgica a tiempo y se incluye castración en el mismo procedimiento. La recidiva es rara si se hace técnica con obturador interno y buena recuperación postoperatoria.
Conclusión
La hernia perineal en perros es una entidad frecuente en machos no castrados de edad avanzada. Su manejo exige una evaluación diagnóstica completa, planificación quirúrgica adecuada y seguimiento postoperatorio riguroso.
El éxito a largo plazo depende de una técnica quirúrgica correcta, la identificación de factores predisponentes y, en la mayoría de casos, la castración conjunta para minimizar el riesgo de recurrencia.
Referencias
- ACVS (2023). Perineal Hernias in Dogs. American College of Veterinary Surgeons
- MSD Veterinary Manual. (2023). Hernia perineal en perros
- Scielo Chile. (2015). Estudio clínico de hernias perineales caninas
- UAB – Clínica Veterinaria de Pequeños Animales. (2022). Hernia perineal: revisión clínica y quirúrgica
- Papich, M. G. (2021). Saunders Handbook of Veterinary Drugs (5ª ed.)