La queratitis ulcerativa en perros y gatos es una condición oftalmológica que requiere un manejo rápido y efectivo para prevenir complicaciones graves.
Este artículo proporcionará una guía completa sobre las causas, diagnósticos y tratamientos disponibles para la queratitis ulcerativa, asegurando un enfoque exhaustivo para mejorar la salud ocular de nuestros pacientes.
¿Qué es la queratitis ulcerativa en perros y gatos?
La queratitis ulcerativa es una afección que involucra la inflamación y ulceración de la córnea, la cual puede progresar rápidamente y causar pérdida de visión si no se trata adecuadamente. Esta condición es común en perros y gatos y puede presentar diversos grados de severidad.
Causas de la queratitis ulcerativa
Las causas de la queratitis ulcerativa en perros y gatos pueden ser variadas e incluyen:
- Trauma ocular: Golpes, arañazos o cuerpos extraños en el ojo.
- Infecciones: Bacterianas, virales (como el herpesvirus felino) o fúngicas.
- Sequedad ocular: Frecuente en razas predispuestas a queratoconjuntivitis sicca (KCS).
- Deficiencia de la película lagrimal: Problemas en la producción o distribución de las lágrimas.
- Enfermedades sistémicas: Como diabetes mellitus o enfermedades inmunomediadas.
- Factores ambientales: Exposición a irritantes químicos o humo.
Signos clínicos
Los signos clínicos de la queratitis ulcerativa incluyen:
- Enrojecimiento ocular.
- Lagrimeo excesivo.
- Dolor ocular evidente (blefaroespasmo).
- Descarga ocular purulenta o mucosa.
- Opacidad corneal.
- Cambios en el comportamiento, como frotarse los ojos contra superficies.
Pruebas recomendables para investigar las causas
Para diagnosticar la queratitis ulcerativa y determinar su causa subyacente, se recomiendan las siguientes pruebas:
- Examen oftalmológico completo: Incluye la evaluación de la córnea, la cámara anterior y el fondo del ojo.
- Prueba de fluoresceína: Para detectar úlceras corneales.
- Citología corneal: Para identificar células inflamatorias y microorganismos.
- Cultivo y sensibilidad: Para identificar patógenos específicos y determinar la susceptibilidad a los antibióticos.
- Prueba de Schirmer: Para evaluar la producción lagrimal.
- PCR: Para detectar infecciones virales como el herpesvirus felino.
Enfoques terapéuticos para la queratitis ulcerativa
El tratamiento de la queratitis ulcerativa se enfoca en aliviar el dolor, controlar la infección y promover la cicatrización corneal. Aquí se describen los enfoques terapéuticos más efectivos:
Tratamiento médico
- Antibióticos tópicos:
- Perros: Tobramicina 0.3%, una gota cada 4-6 horas.
- Gatos: Eritromicina 0.5%, una gota cada 6-8 horas.
- Antivirales tópicos (para gatos con infecciones virales):
- Trifluridina 1%, una gota cada 4 horas.
- Lágrimas artificiales:
- Perros y Gatos: Aplicar según necesidad para mantener la lubricación ocular.
- Antiinflamatorios (uso con precaución):
- Perros: Prednisolona 1%, una gota cada 12 horas (si no hay infección activa).
- Gatos: Dexametasona 0.1%, una gota cada 12 horas (si no hay infección activa).
- Analgesia:
- Perros: Meloxicam, 0.1 mg/kg cada 24 horas, vía oral.
- Gatos: Buprenorfina, 0.01-0.02 mg/kg cada 8-12 horas, vía sublingual.
Tratamiento quirúrgico
- Desbridamiento corneal:
- Remover tejido necrótico para promover la cicatrización.
- Tarsorrafia temporal:
- Suturar los párpados parcialmente para proteger la córnea.
- Conjuntivoplastia:
- Utilizar tejido conjuntival para cubrir la úlcera corneal profunda.
Tratamiento de las enfermedades subyacentes
- Queratoconjuntivitis Sicca (KCS):
- Perros: Ciclosporina A 0.2%, una gota cada 12 horas.
- Gatos: Tacrolimus 0.02%, una gota cada 12 horas.
- Herpesvirus Felino:
- Gatos: L-lisina, 500 mg cada 12 horas, vía oral.
Monitoreo y cuidados posteriores
- Revisiones frecuentes: Monitorear la evolución de la úlcera y ajustar el tratamiento según sea necesario.
- Educación al tutor: Informar sobre la importancia de seguir el tratamiento y evitar traumatismos en el ojo afectado.
- Prevención de recurrencias: Implementar medidas preventivas como el uso de colirios lubricantes y protección ocular.
Medicamentos comunes y dosis
Medicamento | Principio Activo | Dosis en Perros | Dosis en Gatos | Vía de Administración |
Tobramicina | Tobramicina | 0.3%, una gota cada 4-6 horas | No recomendado | Tópica |
Eritromicina | Eritromicina | No recomendado | 0.5%, una gota cada 6-8 horas | Tópica |
Trifluridina | Trifluridina | No recomendado | 1%, una gota cada 4 horas | Tópica |
Prednisolona | Prednisolona | 1%, una gota cada 12 horas | No recomendado | Tópica |
Dexametasona | Dexametasona | No recomendado | 0.1%, una gota cada 12 horas | Tópica |
Meloxicam | Meloxicam | 0.1 mg/kg cada 24 horas | No recomendado | Oral |
Buprenorfina | Buprenorfina | No recomendado | 0.01-0.02 mg/kg cada 8-12 horas | Sublingual |
Ciclosporina A | Ciclosporina A | 0.2%, una gota cada 12 horas | No recomendado | Tópica |
Tacrolimus | Tacrolimus | No recomendado | 0.02%, una gota cada 12 horas | Tópica |
L-lisina | L-lisina | No recomendado | 500 mg cada 12 horas | Oral |
Conclusión
El abordaje de la queratitis ulcerativa en perros y gatos requiere un diagnóstico preciso y un tratamiento integral para asegurar la salud ocular de los pacientes. Con el conocimiento adecuado y una intervención oportuna, es posible prevenir complicaciones graves y mejorar significativamente la calidad de vida de nuestros compañeros animales.
Referencias
- Maggs, D. J., Miller, P. E., & Ofri, R. (2017). Slatter’s Fundamentals of Veterinary Ophthalmology. Elsevier.
- Gelatt, K. N., & Gilger, B. C. (2021). Veterinary Ophthalmology. Wiley-Blackwell.
- Stiles, J. (2013). Veterinary Ophthalmology: A Manual for Nurses and Technicians. Wiley-Blackwell.