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Todo lo que debes saber sobre hematocrito alto en perros

Hematocrito alto en perros: Causas, síntomas y tratamiento

El hematocrito es uno de los parámetros que vemos reflejado en la serie roja de una analítica sanguínea. Además, seguro que es una de las primeras cosas que te fijas cuando tienes los resultados en la mano (o en la pantalla).

El hematocrito en perros, como cualquier parámetro, puede estar en los rangos normales, más bajo, o más alto que estos. Cuando están más bajos solemos hablar de anemias. ¿Pero qué pasa cuando está alto? ¿Qué información nos da esto acerca de la salud del perro? ¡Vamos a ver todo esto!

¿Qué significa hematocrito alto en perros?

El hematocrito es el volumen que ocupan los eritrocitos (glóbulos rojos) en la sangre. Este es el motivo por el que siempre lo hemos expresado como porcentaje.

La función principal de los eritrocitos es la de transportar el oxígeno a todos los tejidos (y devolver el carbono dióxido a los pulmones). Esto lo hacen gracias a la hemoglobina, la proteína que está en el interior de los glóbulos rojos. Es por eso, que el hematocrito alto y la hemoglobina alta están relacionadas. 

Los eritrocitos se crean en la médula ósea. Estos glóbulos rojos inmaduros, llamados reticulocitos, se liberan al torrente sanguíneo. El tiempo de maduración hasta convertirse en hematíes es de 24 horas aproximadamente. Una vez maduros, su vida media es de entre 100 a 120 días en perros.

Todo esto es importante tenerlo claro para entender el siguiente punto acerca de las causas del hematocrito alto. Pero si hablamos de los rangos de referencia, en perros, se sitúan entre 37,3 – 61,7 %.

hematocrito

Causas y síntomas más comunes del hematocrito alto en perros

Siendo el hematocrito alto un indicativo de más eritrocitos en sangre de lo habitual, esto puede suceder por dos motivos:

  • Porcentaje de plasma menor del habitual, lo que lleva a que aparentemente el volumen de eritrocitos se vea incrementado porcentualmente
  • Hay más eritrocitos de lo habitual en la sangre circulante

En el primer caso, estamos hablando de policitemia relativa. La disminución de plasma normalmente suele ser consecuencia de una deshidratación severa. En estos casos, los signos clínicos más habituales en perros suelen ser el jadeo, tiempo excesivo en relleno capilar, apatía y poca energía, vómitos que pueden ser con o sin diarrea, trufa seca, etc.

Aunque la policitemia relativa también puede ser consecuencia de quemaduras.

Cuando la causa del hematocrito alto es mayor cantidad de eritrocitos de lo habitual, en este caso estamos hablando de policitemia absoluta. Además, podemos subdividirla en dos causas: la policitemia primaria (o policitemia vera), y la policitemia secundaria.

La policitemia vera suele deberse a un trastorno de la médula ósea, que produce más eritrocitos, en forma de reticulocitos en su forma inmadura, de los habituales. Ocurre sin que aumente la eritropoyetina. Este es un síndrome mieloproliferativo. No es muy común en perros, y normalmente afecta a perros jóvenes o de edad media, y a ambos sexos por igual.

El diagnóstico de la policitemia vera suele darse por exclusión de la policitemia relativa y secundaria.

Y cómo policitemia absoluta también tenemos la policitemia secundaria. Esta es debida a un aumento de la producción de eritropoyetina en los riñones. Las causas, en este caso igualmente, pueden ser variables, entre las que se encuentran: enfermedad renal, hipoxia, enfermedad pulmonar, shunt cardiovascular, o neoplasia, entre otras.

Algunos de los síntomas que se pueden observar son (aunque no siempre ocurren): vómitos, diarrea, poliuria, letargo, ataxia, intolerancia al ejercicio, encías de color rojo oscuro o azuladas, estornudos, hemorragias nasales y abdomen hinchado,

Tratamiento

El tratamiento de elección para los perros con el hematocrito alto dependerá de las causas por lo que se ha originado. Para ello, es importantísimo hacer un buen diagnóstico previo.

Cuando la causa del hematocrito alto es la policitemia relativa, es de vital importancia rehidratar al paciente. 

También es muy importante reducir el hematocrito, normalmente mediante flebotomías. En las policitemias secundarias lo más conveniente siempre sería abordar la causa primaria por la que está sucediendo. Si por el motivo que sea esto no es posible, también podemos recurrir a las flebotomías. 

¿Te has encontrado en muchas ocasiones con perros con el hematocrito alto? ¿Has podido averiguar la causa? ¿Qué pruebas diagnósticas hicisteis y cuál fue el tratamiento de elección? ¡Nos encantará leerte!

Estudios y bibliografía

Desiré Huerga

Desiré es licenciada en física por la Universidad del País Vasco y ATV. Uniendo estas dos pasiones, ha realizado varios cursos de especialización sobre diagnóstico por imagen, haciendo internados en hospitales. Además, se enamoró del quirófano desde el primer día que entró en uno. Le encanta la divulgación, y piensa que la formación continúa y la información veraz es imprescindible para esta profesión.

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